Buenas querido/a lector/a, hoy te traigo una parábola que hace unos días escuche en el colegio de mis hijos, y me gustó especialmente por el gran significado que tiene.
Quiero compartir contigo estas letras, aunque ya la conozcas, con la intención de que la leas desde una visión menos neutra y más personal,
¿Qué sentido tiene para ti?
¿A quién te gustaría darle estos consejos?
¿De quién te hubiera gustado escuchar estas palabras?
El Emprender de un Lápiz.
Un fabricante de lápices tomó un lápiz justo antes de meterlo en su caja, y le dijo:
Hay cinco cosas que debes saber antes de que seas enviado a emprender el nuevo camino, recuérdalas toda tu vida y serás el mejor lápiz del mundo.
1- Siempre harás cosas grandiosas, pero sólo si te dejas sostener en la mano de alguien más.
2- Experimentarás el dolor en algunas ocasiones en que te saquen punta, pero será necesario para que seas cada vez un mejor lápiz.
3- Tendrás errores, pero tendrás un borrador para corregirlos todos.
4- La parte más importante de ti es la que llevas dentro.
5- En cualquier superficie que seas usado, tendrás que dejar tu marca. No importan las circunstancias o las condiciones, deberás continuar escribiendo.
El lápiz entró en su caja prometiendo recordar estas cinco cosas y con un propósito en su corazón de ser útil.
Cada uno de nosotros podemos buscar nuestro propósito de ser útiles en la vida que nos haya tocado vivir, encontrar esa misión por la que levantarnos todos los días y saber que cada acción que elijamos realizar puede contribuir a otros.
Seremos lápices en muchas ocasiones y responsables de escribir nuestra historia y también responsables de poder cambiar de camino cuando por el que vamos no nos lleva donde queremos.
Y en ocasiones seremos las manos que sujete el lápiz y que lo dirija y saque punta aunque duela, porque sabemos que así haremos un mejor lápiz.
¿A quién puedes dar la mano ahora?
¿Necesitas sacar punta y el miedo al dolor es demasiado que has decidido dejar de escribir tu historia?
No dejes de sacar punta, no dejes de sujetar, no dejes de escribir tu historia porque tú mereces vivir la tuya y dejar de vivir la que otros lápices han escrito por ti.
A mi realmente me ha gustado mucho esta parábola, engloba todo aquello que necesitamos para avanzar y sobre todo para ayudar a avanzar a aquellas personas que nos rodean y nos necesitan.
Espero que a ti te sirva también.
Fortaleza, Pasión y
que Hagas hoy el mejor día.